Esperamos que el cambio de mando en la dirección de Pasaportes pueda poner fin a los problemas que hay en esa dependencia del gobierno.
Lorenzo David Ramírez Uribe estará a cargo de ese servicio en sustitución de Digna Reynoso.
Tiene en sus manos la encomienda de reducir las constantes quejas de los ciudadanos por el servicio y de llevar a puerto seguro el proyecto de pasaporte biométrico, del cual se viene hablando desde hace una década sin que sea concretado.
Si bien la pandemia generó desafíos en términos de la disponibilidad de las libretas, lo cierto es que a estas alturas no hay excusas para la lentitud registrada en las expediciones, pues afecta a los ciudadanos que quieren salir de la República Dominicana.
Igualmente, no tiene sentido el tiempo que se ha tomado poner en práctica el pasaporte biométrico, un paso importante para que los dominicanos podamos tener un mecanismo de identificación certero y reconocido en las principales naciones del mundo.
Ojalá Ramírez Uribe dé la talla y resuelva pronto ambos temas.