De acuerdo con Siobhan Morden, director general de Latin America Fixed Income Strategy de Santander US Capital Markets, una victoria del presidente Luis Abinader le daría mayor capital político, lo que fortalece las perspectivas para una reforma fiscal.
«Aún es temprano en el ciclo electoral, sin embargo, el incumbente debería beneficiarse de vientos favorables para una posible victoria en la primera vuelta. Esto sugiere optimismo por un mayor capital político y oportunidad para la reforma fiscal. Esto valida el rendimiento superior relativo y la justificación de nuestra recomendación de sobreponderación este año sobre el potencial de una calificación de grado de inversión», señala el ejecutivo.
Añade que el rendimiento superior frente a pares con calificación BB puede reflejar una oferta técnica local, pero también podría explicarse fácilmente por el optimismo de la transición política después de las elecciones.
«La evaluación principal de cualquier crédito BB es, si se trata de un carry trade o de un breakout trade, hacia la categoría de grado de inversión», indica.
En un documento son su análisis se detalla: «Hubo un marcado contraste en la transición de nuestro viaje desde Panamá a la República Dominicana con un crédito vulnerable a perder su calificación de grado de inversión y el otro en una trayectoria potencial para lograr una calificación de grado de inversión».
Y: «Aún es temprano en el ciclo electoral, pero el debate no fue si el presidente Abinader es reelegido, sino si en la primera vuelta el 19 de mayo o en la segunda vuelta el 30 de junio, con un apoyo del 55 % cerca del umbral de la primera vuelta del +50 % de victoria».
Considera que la fortaleza de las elecciones municipales del 18 de febrero del 2024 sugiere un apoyo subyacente para una victoria en la primera vuelta.
Morden detalla que «la administración actual también se beneficia del aumento de la actividad económica con el Banco Central esperando un crecimiento del PIB del 5 % -5.5 % este año».
«Ya hubo un cambio de tendencia a finales del año pasado en lo que parece ser una recuperación hacia un crecimiento del PIB del 5 % después de un ciclo de estímulo monetario y normalización en las operaciones mineras», comenta.
Dice que este mandato político (actual gobierno) más fuerte proporcionaría un contexto ideal para la reforma fiscal.
«Ha habido mucho debate sobre la reforma fiscal, y con la renovación del mandato político se da la oportunidad ideal para finalmente impulsar reformas controversiales», argumenta.
- Plantea que la introducción de la regla fiscal en el legislativo representa el primer paso con una comunicación frecuente con el FMI y las agencias calificadoras sobre el contexto y la justificación para lograr una calificación de grado de inversión.
Distribución de la carga
«Aún es temprano para evaluar los detalles (el Artículo IV del FMI proporciona alguna orientación) sobre la distribución de la carga (menores exenciones de IVA o impuestos sobre la riqueza)», precisa Morden.
El ejecutivo de Santander Corporate & Investment Banking agrega que «prácticamente no hay flexibilidad presupuestaria en los gastos de capital bajos, subsidios eléctricos crecientes y la alta responsabilidad contingente de recapitalizar el Banco Central».
«Hay una clara prioridad para lograr una calificación de grado de inversión, con mayores ingresos como la única alternativa viable para reducir el déficit fiscal más cerca del 2 % del PIB y la deuda gradualmente más baja hacia el 40 % del PIB».
Indica que «no hay soluciones rápidas sobre la sostenibilidad de la deuda, ya que la regla fiscal estipula ratios bajos de ~40 % del PIB solo en 2035″. «Sin embargo, los mercados preferirían la reforma fiscal sobre la contención del gasto debido al menor riesgo de ejecución para estabilizar la dinámica de la deuda».