No sólo las mujeres embarazadas deberían abandonar el consumo de la cerveza. Aquí listamos que otras personas deberían reducir o evitar el consumo de esta bebida altamente popular.
Enfermedad hepática: el alcohol daña al hígado más que ninguna otra bebida. Las personas que tengan esta enfermedad deberían suprimir el consumo de la cerveza. Beber alcohol puede empeorar la enfermedad hepática y aumentar el riesgo de cáncer de hígado.
Afecciones cardíacas: según una investigación dirigida por un equipo del Hospital General de Massachusetts y el Instituto Broad del MIT y Harvard, hay aumenos en el riesgo cardiovascular al pasar de cero a siete tragos semanales de cerveza.
Hipertensión: cuando se bebe por encima de un consumo moderado, el alcohol puede elevar la presión arterial en varios puntos.
Diabetes: se deben tener consideraciones importantes para beber alcohol de forma segura.
Afecciones neurológicos: en algunos trastornos, el consumo de alcohol podría empeorar las condiciones.