El presidente Luis Abinader se encargó en persona de despejar cualquier duda de que Raquel Peña será su compañera de boleta en las próximas elecciones de 2024.
El anuncio no era tan obvio en el mundo político, pues los runrunes de que varias figuras de renombre buscaban acompañar a Abinader y desplazar a Peña no eran pocos.
De hecho, mediciones internas dentro del Partido Revolucionario Moderno (PRM) colocaban al ministro de Turismo, David Collado, y a la alcaldesa del Distrito Nacional, Carolina Mejía, como excelentes acompañantes para Abinader.
Al final, Peña se queda, pero siguen en el limbo dos candidaturas importantes en el Distrito Nacional, primero la Alcaldía y segundo el escaño senatorial que ocupa Faride Raful. Ambos puestos están reservados y se hace fundamental que el PRM aclare las aguas lo antes posible, como ocurrió ayer con Peña.
La alianza opositora ha tomado pasos concretos en esa ruta, mientras el oficialismo todavía juega a alianzas y escenarios que se prestan a especulaciones mayores cada día que pasa. Así que esperan Faride y Carolina por definir su futuro político, por lo menos de manera pública. Veremos si se da pronto.