La incidencia de la diabetes en la región de Las Américas se ha triplicado desde 1980.
Nuestro país no escapa a la tendencia y más del 13, 4 % de los dominicanos ya está diagnosticado. Por ser una enfermedad “silenciosa” se calcula que hasta un 40 % de quienes la padecen podrían no estar al tanto de que la dolencia avanza en su organismo.
A los especialistas les preocupa que el avance, además de notorio, se manifiesta en una población cada vez más joven. El cambio de los hábitos alimenticios, el sedentarismo y el aumento de peso en los grupos de adolescentes y adultos jóvenes son algunas de las causas de este crecimiento. Eso, claro, en la diabetes tipo 2 ya que la diabetes tipo 1 no se puede prevenir. Los esfuerzos por educar a la población sobre los riesgos de esta terrible enfermedad no son todavía suficientes.
El 14 de noviembre es el día elegido para crear conciencia sobre este mal que altera gravemente la calidad de vida del paciente y que acarrea unas consecuencias sumamente peligrosas. El mayor riesgo es ignorarlo.