Fin de año suele ser estresante. En diciembre no sólo están las fiestas, sino que además se suelen dar situaciones laborales y académicas que requieren mucha atención y energía.
Aquí hay algunas señales que te indican que el estrés estácausando estragos:
- Somático: pueden aparecer dolores, contracturas, tensiones musculares, algún trastorno digestivo y aparición de enfermedades producto de la baja de las defensas.
- Emocional: puedes notar que tienes mayor irritabilidad, menos paciencia, mayor insatisfacción, ira, fatiga, trastornos de ansiedad, de sueño y un mal ánimo en general.
- Cognitivo: tienes menos memoria y te cuesta más concentrarte, sientes que tus funciones y tu productividad merma y tienes también problemas de rendimiento.
Qué hacer:
Planifica: establece objetivos y prioridades para poder administrar bien el tiempo y destinar momentos para incluso tomarte recreos y pausas.
Aceptación: acepta las emociones y no te sobre exijas. Si quizás no quieres pasar alguna de las fiestas con alguna persona en particular, ¡vamos! no lo hagas. No te obligues a hacer cosas que no quieres.
Evita los excesos: esto te permitirá cumplir con todas tus obligaciones. Puedes pasarla bien en las fiestas, sin tener excesos que afecten tu rendimiento.
Cuando los recursos y estrategias no parecen alcanzar para enfrentar los diferentes estresores, es importante buscar la consulta con un profesional.