El presidente Luis Abinader ha sido el gobernante de los últimos treinta años que más recursos económicos ha transferido a los municipios del país.
Desde el inicio de su gestión, ha demostrado una visión clara sobre la importancia de los municipios como espacios fundamentales para la formación de conciencia cívica y el ejercicio de una ciudadanía activa.
A nivel local, los ciudadanos tienen más posibilidades de acceder a información y servicios que les beneficien, así como de expresar sus inquietudes y exigir rendición de cuentas a sus autoridades municipales. Los municipios no solo cumplen una función administrativa, sino que también son semilleros de la democracia participativa.
El gobierno, según explicó el presidente en su conferencia de prensa semanal, ha estructurado su estrategia municipal en tres ejes fundamentales:
- Responder a las demandas de la gente en los territorios, es decir, en los municipios.
- Mejorar los servicios municipales, como el suministro de agua, la recolección de basura, el bacheo de calles y el mantenimiento de mercados.
- Transparencia y fortalecimiento municipal.
Resultados en el terreno
¿Cómo se ha expresado este programa en la práctica? Se han realizado 96 consejos de desarrollo municipal, que han generado 86 planes de desarrollo y 14 planes de ordenamiento territorial. En estos encuentros, los representantes de las comunidades presentan sus necesidades, las cuales, según explicó el gobierno, son analizadas, priorizadas e incorporadas al Presupuesto General de la Nación.
Además, el gobierno dispuso de 6,000 millones de pesos para ser invertidos en mejoras de aceras, contenes, cementerios, mataderos y otros espacios públicos.
Cabe destacar que, según la legislación vigente, los municipios deberían recibir el 10 % del Producto Interno Bruto (PIB) del país, algo que nunca se ha cumplido. Sin embargo, el expresidente Hipólito Mejía elevó los aportes municipales hasta casi un 5 %, porcentaje que posteriormente disminuyó a poco más del 2 % durante los gobiernos del Partido de la Liberación Dominicana (PLD). Cada gobierno ha justificado esta reducción argumentando que las inversiones desde el nivel central en carreteras, planes de vivienda y asfaltado de calles compensan los fondos que los ayuntamientos dejan de recibir.
A pesar de estas limitaciones, el aporte directo del Estado ha aumentado considerablemente. En 2019, los municipios recibieron 17,000 millones de pesos, mientras que el presupuesto de este año contempla 26,000 millones.
Importancia de la descentralización
La gestión local de recursos es clave porque permite que la inversión se adapte a las particularidades de cada comunidad, contribuyendo a mejorar significativamente las condiciones de vida, especialmente en zonas afectadas por la pobreza y la desigualdad.
En un sistema político con alta concentración de poder a nivel central, la descentralización municipal desempeña un papel fundamental en la gestión de los servicios públicos y en el desarrollo económico local.
Transparencia y nuevas herramientas
Un aspecto novedoso es que la transparencia parece haberse afianzado en los municipios. A través de la plataforma digital Municipalidad en tus manos, los ciudadanos pueden dar seguimiento a la ejecución de proyectos, mientras que una herramienta desarrollada por DIGEPRES permite acceder a información sobre la ejecución presupuestaria.
Además, la aprobación de las leyes de regiones únicas de planificación y de ordenamiento territorial representa un paso significativo en la modernización del sistema municipal.
Desafíos y oportunidades
Con estos avances, la administración municipal puede maximizar sus recursos y aprovechar las ventajas comparativas de cada localidad, como el ecoturismo y el desarrollo de industrias locales. Sectores como la producción de dulces, panadería, gastronomía, artesanía y hotelería pueden fortalecerse a través de políticas municipales que fomenten la creación de empleo y el impulso de las pequeñas y medianas empresas. Este enfoque contribuye a la construcción de una economía más inclusiva y sostenible.
Los desafíos de los municipios están siendo abordados con éxito, aunque aún queda mucho por hacer. Lo cierto es que el presidente Abinader ha demostrado un compromiso firme con el fortalecimiento de la municipalidad, consciente de que los gobiernos locales representan la primera línea de respuesta ante las demandas ciudadanas. Son catalizadores de la democracia y motores del desarrollo local.
No obstante, quedan pendientes importantes desafíos en el ámbito municipal, como la recolección de desechos sólidos, la migración extranjera y el tránsito.