El jefe de Estado de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, destacó el lanzamiento de la Alianza contra el Hambre y la Pobreza, y el inicio de las discusiones para la creación de un impuesto a los superricos como dos de los principales logros de la presidencia brasileña del G20, que concluyó simbólicamente este martes.
El líder progresista destacó las dos iniciativas en el discurso con el que clausuró la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de las mayores economías del planeta, que tuvo lugar entre lunes y martes en Río de Janeiro.
Lula dijo que, así como lo hicieron Indonesia en 2022 e India en 2023, y como espera que lo haga Sudáfrica en 2025, Brasil buscó este año promover en el G20 «medidas con impacto concreto sobre la vida de las personas».
El mandatario brasileño destacó principalmente el lanzamiento de la Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza, una iniciativa suya y que nació con 148 miembros fundadores, incluyendo 82 países, más la Unión Europea y la Unión Africana.
«Iniciamos un debate inédito sobre la creación de un impuesto sobre los superricos«, agregó Lula.
En la declaración final de la cumbre de Río, divulgada el lunes, el G20 manifestó su apoyo a la «tributación progresiva» para que los ricos paguen impuestos de forma más efectiva y se comprometió a proseguir sus discusiones en torno a la propuesta brasileña para la posible creación de un tributo global a los superricos.
En una mención bastante genérica, los líderes se dijeron dispuestos a «cooperar para garantizar que las personas con un patrimonio neto muy elevado paguen impuestos de manera efectiva», un compromiso que exigirá varios años de negociaciones antes de que pueda ser traducido en un convenio o un tratado.
Lula también destacó en su discurso que, tras dos años en que las divergencias de los miembros del G20 en torno a la guerra entre Rusia y Ucrania frenaron cualquier avance, «volvimos a adoptar declaraciones consensuales en casi todos los grupos de trabajo».
«Colocamos los cambios climáticos en la agenda de los Ministerios de Economía y de los Bancos Centrales, y aprobamos el primer documento multilateral sobre bieconomía», dijo Lula al referirse a otros avances del G20 bajo la presidencia brasileña.
Igualmente citó la aprobación de una guía para mejorar la eficacia de los bancos multilaterales y de la voz que se le dio a los países africanos en las discusiones mundiales sobre el endeudamiento.
Lula también destacó la creación de un Grupo de Trabajo sobre el Empoderamiento de las Mujeres y la aprobación de la propuesta brasileña para crear un decimoctavo objetivo de desarrollo sustentable destinado a promover la igualdad racial