Se habla mucho de las suegras y su mala fama tratando a las parejas de sus hijos, pero a veces esa actitud se extiende a una gran parte de la familia. No es un secreto el hecho de que existen familias que son bastante tóxicas y maltratan mucho a las parejas sus hijos.
Allí no faltan los comentarios hirientes disfrazados de bromas, críticas y comparaciones constantes; hasta excluirlos del círculo familiar, manipulación emocional, entre otros. Con esto pueden hacerle la vida de cuadritos a tu pareja y esto se va a sentir en tu relación.
En vista de esto, surge la pregunta: quién debe proteger a tu pareja de tu familia, quien debe poner el límite y exigir que su pareja sea respetada y aceptada en su familia.
Pues te toca a ti. Poner límites y pedir que su pareja y su elección sea respetada, es tu responsabilidad.
Es un acto de protección y cuidado que lleva un mensaje claro a ambas partes; a tu pareja le dices que estás de su lado, y a tu familia que no estás de acuerdo con sus malos tratos.
En algunas familias, muy cerradas, en donde los hijos se tratan como propiedad privada, esto puede ser una verdadera lucha de poder. Por lo que va a requerir bastante capacidad de diálogo y firmeza en tu objetivo.
Pasos a seguir
El primer paso para proteger a tu pareja es priorizar tu relación y reconocer estos comportamientos en tu familia, en vez de negarlos, minimizarlos o mirar hacia otro lado.
No le toca a tu pareja reclamar respeto y espacio en tu familia, ya que ella es externa a ese núcleo familiar. Y hacerlo solo traerá mayores conflictos y malentendidos.
Establecer límites claros con tu familia es el siguiente paso. Comunica de manera firme, pero respetuosa, que ciertos comportamientos no son aceptables. Es posible que te toque confrontar a un miembro de la familia que ha sido problemático con tu pareja, o establecer reglas sobre las interacciones futuras.
Crea espacios seguros donde tu pareja se sienta cómoda y respetada, no la expongas a un ambiente tóxico innecesariamente. Trata de limitar las interacciones con aquellos miembros de la familia que no la tratan bien, y busca entornos en los que ambos puedan disfrutar sin tensiones.
Cuando proteges a tu pareja de los malos tratos de tu familia, le das una muestra de amor y respeto que refuerza la relación.
Le demuestras que valoras su bienestar por encima de las presiones familiares, y fortalece el vínculo al enfrentar juntos los desafíos. La relación de pareja es un círculo cerrado en donde un tercero, aunque sea la familia, rompe la armonía.
