Las restricciones a la prensa en las coberturas gubernamentales no dan tregua. Ayer ocurrió en San Cristóbal en los actos oficiales en un hospital de Yaguate y en el centro de interdicción de Migración en Haina, en momentos claves de las ceremonias. No dieron paso ni a los fotógrafos. El apuro fue notorio, al extremo de que el locutor oficial en repetidas ocasiones decía: “los amigos de la prensa pueden pasar para que acompañen al presidente”. Pero no pasó…