Al presidente Luis Abinader le fue de lo mejor ayer en Jarabacoa, pues le hicieron una fiesta sorpresa en la víspera de su cumpleaños. Hubo mariachis, bizcocho y hasta un bonsái que le llevaron de regalo. Al gobernante le cantaron sus mañanitas bien temprano, pues este viernes arriba a sus 57 años. Para dejar las cosas muy en claro y que nadie se haga el despistado, Abinader remachó que hoy hay trabajo normal en el Palacio, y que tiene como siete reuniones. Atención Palacio.