El ministro de Energía y Minas, Antonio Almonte, cuestionó las razones detrás del incremento del déficit financiero que han tenido las Empresas Distribuidoras de Electricidad (EDE) en los últimos tres años, y precisó que el incremento en los precios de los combustibles en el mercado internacional fue la principal razón detrás de su expansión.
«Los debates (sobre el sector eléctrico) en los últimos meses han sido fuertes, y todos coinciden en un lugar común: el déficit financiero de las distribuidoras se debe a las pérdidas de energía«, refirió durante su participación en el congreso «Economía y energía«, organizado por la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) desde el 9 al 11 de julio.
Sin embargo, el funcionario sostuvo que el déficit financiero operacional de las distribuidoras fue de 867 millones de dólares en el 2021, con un nivel de pérdidas de 32.6 %, y que el incremento de precios de los hidrocarburos en el mercado internacional ha generado una «estampida» del déficit financiero de las empresas distribuidoras.
Para el 2022 este ya había aumentado a poco más de 1,300 millones de dólares, con unas pérdidas de 32.4 %, dos puntos porcentuales menos que en el año anterior.
- A abril del 2024, las pérdidas del sector eléctrico se habían situado en 37.1 %; 3.5 puntos porcentuales por encima de abril del 2023, lo que representa un aumento de 10.3 % en ese año, según el más reciente Informe de Desempeño del Sector Eléctrico que realiza el Ministerio de Energía y Minas.
Según este análisis, el déficit entre la compra y la venta de energía de las EDE fue de 265.8 millones de dólares en los primeros cuatro meses de este año, una caída de 41.4 % respecto a los 641.9 millones de dólares facturados entre enero y abril de este año.
Precios en el mercado internacional
Almonte tildó de «relato sencillo» a quienes analizan que el incremento del déficit financiero en el último cuatrienio se debe a las pérdidas, y señaló que «no es correcto».
«Hay que auscultar los factores determinantes, y el factor principal determinante fue el precio de los combustibles, basado en el precio del gas natural, sobre todo, y otros combustibles por (los efectos de) la guerra de Ucrania», puntualizó.
De igual forma, señaló que las EDE estaban comprando a un precio «igual o menos» al que se les vendía a los consumidores, una relación entre venta y compra que «no hay empresa que la sostenga».
Recordó que la República Dominicana se ve obligada a importar gas natural, petróleo y carbón, tres combustibles de los cuales depende la producción energética del país, lo que hace a la matriz energética susceptible a las variaciones de precios en el mercado internacional y representa «serias restricciones» en términos de costos y de almacenamiento.
Sostuvo que esto hace que el Gobierno tome la medida de contener, a través de subsidios, los precios reales de los combustibles, para evitar que afecten su venta en el mercado interno.