La riada que dejó una señora fallecida y daños cuantiosos en predios de diversos productos agrícolas en el municipio Constanza, provincia La Vega, es atribuida a la mala práctica humana.
Ramón Rogelio Genao, senador de esa provincia, asegura que el desastre provocado por el desbordamiento del afluente, que tiene el mismo nombre del municipio montañoso, es el resultado del daño acumulado a la naturaleza.
«El poco control que existe por el uso de suelo entre las actividades agrícolas y urbanísticas está provocando que los fenómenos atmosféricos sean cada vez más fuertes», externó el legislador.
Cuestionó que a orillas de fuentes acuíferas sean habilitados, sin ningún control, proyectos residenciales y sembradíos de productos agropecuarios.
Genao considera que se debe prohibir realizar cualquier tipo de actividad en los alrededores de las fuentes de agua, en cumplimiento a la Ley de Ordenamiento Territorial y las normas del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Las inundaciones provocadas por la crecida del río Constanza a causa de los aguaceros de los últimos días ocasionan pérdidas, aún incalculables, en los cultivos.
Los predios que más sufrieron daños son los de papas, zanahorias, repollos y otros frutos que se producen en esa localidad.
Humberto Collado, presidente de Unión Nacional de Productores Agrícolas, dijo que están trabajando en coordinación con el Ministerio de Agricultura y el Banco Agrícola de la República Dominicana, para cuantificar los daños provocados por el desbordamiento del afluente.
Desechos
Luego de que disminuyó el caudal de la fuente acuífera dejó una cantidad significativa de desechos que, en su mayoría, son materiales que se suelen utilizar en los procesos de siembra de las fincas agrícolas.
Wady Brea, del Consejo Presidencial, hizo un llamado a impulsar programas de canalización y reforestación de las cuencas de todos los cursos de agua en Constanza.
Considera que con esas medidas se pueden evitar futuros desastres.
Brea entiende que los munícipes estarían en la disposición de apoyar esa propuesta.
Los torrenciales aguaceros que provocaron el desbordamiento del río Constanza dejaron, además, más de 300 viviendas afectadas en lugares como Las Auyamas, La Sabina, Cañada Seca, El Valle y otros.