El flujo de remesas recibidas en el país al primer trimestre de este 2024 fue de 2,635.6 millones de dólares, para un aumento de 6.2 % respecto a igual periodo del 2023. Solo en marzo, las divisas se ubicaron en 925.5 millones de pesos.
El informe lo compartió hoy el Banco Central de la República Dominicana (BCRD), indicando que el desempeño económico de los Estados Unidos fue uno de los principales factores que incidió sobre el comportamiento de las remesas, ya que desde ese país se originó el 86.4 % de los flujos formales de marzo, unos 727.8 millones de pesos.
La recepción de remesas por país de envío ubica a España en segundo lugar del total de residentes de la diáspora en el exterior que realizan envíos de dinero a sus familiares en Quisqueya. El valor asciende a 57.4 millones de dólares, un 6.8 % del total.
En tercer lugar se encuentra Italia y Haití, con 0.7 % y 0.6 % de los flujos recibidos, respectivamente. En el resto de la recepción de remesas se distinguen países como Suiza, Canadá y Panamá, entre otros.
De acuerdo con el Banco Central, las remesas constituyen una línea de apoyo vital para las familias que las reciben e inciden directamente sobre la reducción de la pobreza y la desigualdad.
En ese sentido, los flujos recibidos en marzo fueron destinados en su mayoría, un 96.5 % para fines de gastos del hogar, cifra cónsona con estudios previamente realizados por el Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (Cemla). El resto sirvió para saldar deudas de los hogares receptores.
Perspectivas sobre la evolución de las remesas y la inversión extranjera
“Analizando la evolución reciente del sector externo, las perspectivas del BCRD contemplan una evolución favorable de los ingresos de divisas durante 2024, como lo han sido los ingresos de turismo, la inversión extranjera directa y las exportaciones, en conjunto con las remesas”, dice el informe.
En cuanto a las remesas y los flujos de inversión extranjera, se estima que se ubiquen en torno a los 10,400 millones de dólares y a los 4,500 millones de dólares, respectivamente, al terminar el año.
Estos ingresos de divisas favorecen la estabilidad relativa del tipo de cambio que se observa en la actualidad, de tal manera que al cierre de marzo de 2024 la moneda nacional se depreció en 1.7 % con respecto al cierre de 2023.
La institución resalta que, los mayores flujos de ingresos externos han permitido también mantener un nivel adecuado de reservas internacionales, las cuales alcanzaron al cierre de marzo los 13,814.0 millones. Este nivel representa un 11.2 % del producto interno bruto (PIB) y unos 4.9 meses de importaciones, por encima de los umbrales recomendados por el Fondo Monetario Internacional (FMI).