Hoy más que nunca el cabello rizado es apreciado y valorado en diversas partes del mundo.
Él nos regala una imagen una belleza atrevida y con un toque de diversión. Sin embargo, muchas veces es frustrante a la hora de definir las ondas encrespadas. En esa lucha de peinarlo y que dure más, podríamos estar saturándolo de productos que no valen la pena porque dañan su salud.
Cada una tendrá su propio truco, si aún no encuentras el tuyo, intenta descubriendo la bondad de la diadema de lazo grueso que sirvió de inspiración para la creación de los palitos rizadores que actualmente llenan el área de belleza de las grandes y pequeñas tiendas.
- Con ella hasta te puedes ir ir a dormir sin que te sea incómodo.
- El lazo nos permite lograr una forma más natural y no marca en lo absoluto.
Asimismo, si te pones ingeniosa hasta podrías lograr un peinado para salir a la calle del que nadie percibirá la verdadera intención de moldear y ya cuando lo quites disfrutarás de la cabellera deseada.
¿Cómo se hace?
Simple, divide tu cabello en dos, trazando una línea desde la frente hasta la nuca y con la ayuda de un lazo grueso, preferiblemente de tela de toalla, envuelve en forma de diadema desde la raíz hasta las puntas que luego puedes formar uno o dos moños que se verán fenomenales.
Quédate así por unas horas y luego deshaz el peinado, estiliza con las manos y ya estarás lista.