Tras una pausa de un fin de semana sin actividades proselitistas de relevancia, se espera que desde este lunes continúe con fuerza la campaña política, pero ahora enfocada por completo en las elecciones presidenciales y congresuales del próximo mes de mayo.
Es prudente que los partidos involucrados en la contienda manejen este proceso de manera adecuada, sin incentivar a sus parciales hacia acciones desproporcionadas que puedan afectar el desempeño corriente de las actividades diarias del país.
Los resultados de las elecciones municipales han agitado algunos ánimos, tanto del lado de los que salieron más beneficiados, como de aquellos que no fueron favorecidos con los resultados que anticipaban.
La democracia dominicana no puede darse el lujo de retrocesos por pasiones particulares y por encima de cualquier interés personal o grupal, debe cuidarse la institucionalidad.
Como nación hemos avanzado mucho en los últimos 25 años, superando tropiezos y obstáculos, que deben quedarse justo donde fueron dejados: en el pasado.