Con la llegada del crucero Pearl al puerto de Cabo Rojo a principios de enero, incluso con la presencia del presidente Luis Abinader, se entendió que había llegado el momento de Pedernales y que comenzaría el flujo de cruceristas en el proyecto más ambicioso de este gobierno. Pero ha habido contradicciones en la información de la llegada del segundo crucero y al Espía le informaron que no hay un calendario previsto para otra visita en lo inmediato. ¿Qué pasa ahí?