Bueno y doña Faride Raful, senadora del Distrito Nacional por el Partido Revolucionario Moderno, está que no le coge corte a nadie.
Con la salida del leoncito a la competencia, los comentarios y mediciones no se hicieron esperar.
Como respuesta, la senadora oficialista se limitó a decir “venga el padre o que venga el hijo no importa…”, dejando por sentado que está confiada en su trabajo y que no le teme a nadie. Más de unos cuántos se preguntan si Faride habrá sembrado para cosechar.