Colmados, salones y barberías del Distrito Nacional consultados por Diario Libre están de acuerdo con que se les exija una licencia para la venta de bebidas alcohólicas, como lo plantea un proyecto de ley que se estudia en el Senado, autoría del legislador Santiago Zorrilla.
Sin embargo, la mayoría de propietarios y empleados critica que la propuesta solo autorice el expendio de estas bebidas de jueves a domingo. Jeury Sosa, quien trabaja en el Colmado La Esquina, en el sector Los Jardines del Norte, dijo preferir que «las saquen del mercado» antes de restringir las ventas lunes, martes y miércoles.
Aunque explicó que la dinámica del negocio no se afectaría por estos tres días, dijo que «se ve feo que venga un cliente, me pida una cerveza y yo le diga ‘no, yo no puedo venderla hoy'». En ese sentido, considera que el proyecto «es ilógico» y «no tiene sentido».
En esto concuerda Wascar Julián, empleado de Worthy Barber Shop.
«Yo estoy todo el tiempo de acuerdo con la regulación, porque es para que las cosas caminen en orden. Ahora, con lo que no estoy de acuerdo (…) es que le pongan un horario, porque no estamos en pandemia. Si tú les vas a permitir una licencia, tienes que abrir, normal, como estamos ahora», acotó.
Entiende que esta medida afectaría tanto a los clientes como a los ingresos de las barberías, por lo que considera que ese tipo de piezas legislativas deberían analizarse en conjunto con líderes del sector, y no tomar las medidas «desde afuera», porque los policías «desconocen cómo se maneja un negocio por dentro».
En los salones, los clientes piden cervezas a colmados
Gilda Hernández, quien es clienta de Fresita Alta Peluquería, entiende que la medida es necesaria para nail bars, quienes carecen de una autorización para vender este tipo de productos, como sí la tienen los restaurantes.
Sin embargo, entiende que tanto los horarios como los requerimientos para obtener una licencia o certificación desincentivarían a los salones de belleza a optar por ella.
«Seguramente habrá que pagar algo adicional (por la licencia), más todas las diligencias que hay que hacer con las entidades… yo no creo que los salones se quieran poner como vendedores de bebidas alcohólicas», manifestó.
Recordó que, en los salones de belleza, muchos clientes «piden las cervezas a los colmados cuando quieren beber», por lo que estos establecimientos no necesariamente requerirían venderlas, ya que es «una cosa de un día».
Licorerías cuestionan que se les pida la licencia
Los empleados y dueños de licorerías (liquor stores) cuestionaron que se les pida la licencia, ya que explicaron que sus negocios están respectivamente regulados para la venta de estos productos.
«Este negocio se trata de vender para llevar, aquí (dentro) no se bebe. Ya estamos abiertos de 9:00 de la mañana a 11:00 de la noche, todos los días. Por ese tema de los horarios, no hay problema con eso», explicó un empleado de una liquor store quien prefirió preservar su nombre.
Sobre la licencia, la consideró innecesaria. «¿Para qué vamos a pagar más impuestos, si ya estamos cansados de pagar más y no recibimos nada?», lamentó.
El propietario de Left Field Liquor Store, quien se presentó como «Pipito el nudillista», garantizó que su negocio está al día con la ley y que, aunque solicitaría su licencia de aprobarse la ley, considera que los legisladores deberían tener presente a los negocios que cumplen ante el fisco.
«Yo estaba hablando con el hijo mío el otro día, que uno no puede ser ‘tan serio’, a veces (…) Uno cumple, pero uno ve cómo a los que no cumplen les va mejor que a uno, entonces yo quisiera meterme dentro de los que no cumplen«, afirmó.
De igual manera, rechazó los horarios, porque dice que ya su negocio implementa horarios «respetuosos» con su vecindad, abriendo de martes a jueves hasta las 8:00 de la noche y los fines de semana, hasta las 11:00 de la noche.
Vigencia de la licencia, requisitos y condiciones
El proyecto de ley para el Control de Venta, Suministro y Consumo de Bebidas Alcohólicas encarga al Ministerio de Interior y Policía, la emisión de estas licencias, que tendrían vigencia por dos años. Para ello, la ley ordenaría a este Ministerio crear una Dirección de Control de Bebidas Alcohólicas (Digecoba), que vele por el cumplimiento de esta medida.Esto se les exige a todos los centros de expendio, suministro y consumo de bebidas alcohólicas, a excepción de los establecimientos hoteleros y centros turísticos que ya cuenten con una licencia de alimentos y bebidas alcohólicas por parte del Ministerio de Turismo.Para obtenerla, los propietarios deberán facilitar el nombre y la dirección del establecimiento, así como su registro nacional del contribuyente (RNC) y registro mercantil, cumplir con criterios sanitarios mínimos, estar al día en el pago de sus impuestos, indicar su área de actividad y aforo de personas, entre otros requisitos que se establezcan en un futuro reglamento de aplicación de la ley.Para su autorización, las autoridades tomarán en cuenta que los establecimientos no se ubican en lugares que obstruyan calles, aceras o la vía pública en general. Asimismo, deberán encontrarse a más de cien metros de escuelas, hospitales, universidades, escuelas o estancias infantiles.