Con 12 años, el niño Manuel Chávez está en los cines de todo el mundo. Su primera experiencia en la actuación ha sido en la cinta “Black Panther: Wakanda Forever» de Marvel Studios interpretando a Namor (niño), papel que de adulto lo asume el actor y activista mexicano Tenoch Huerta Mejía.
El jovencito nacido en Nueva York, de madre dominicana y padre ecuatoriano, se encuentra en República Dominicana. Él y su progenitora, Maribel Maceo, conversaron con Diario Libre durante un pequeño encuentro organizado por Carribbean Cinemas en Downtown Center.
Primera vez en el cine
Manuel Chávez se mostró feliz de verse en el cine en una película tan importante. Con su participación se conocerá el origen de Namor, el Dios Serpiente Emplumada, en la piel de Tenoch Huerta Mejía, además de algunas escenas serias y dramáticas.
Chávez, que entiende el español pero lo habla muy poco, tiene muchas cosas por vivir. Pero algo de lo que está muy seguro hasta ahora es que desea seguir aprendiendo del mundo del cine.
En 10 años tendrá 22 años de vida y se visualiza haciendo cine de acción, de superhéroes o ciencia ficción, pero no cintas románticas.
«En 10 años me veo en el colegio (escuela) de actuación», agrega.
Además de su pasión por la actuación, Manuel practica el piano y aprende parkour y natación. Cursa el 7mo grado en los Estados Unidos.
De la comida dominicana, su favorita es la bandera (arroz, habichuela y carne), en especial por el arroz que cocina su abuela materna. «Sabe muy buena», sonrió.
Maribel Maceo, nacida y criada en Bonao, y residente hace 30 años en los Estados Unidos, confiesa que al pequeño lo mantienen con los pies en la tierra. De hecho, él mismo se ha mostrado sorprendido de que mucha gente lo reconozca porque, en palabras de ella, él no se considera una celebridad.
El menor continúa estudiando y desarrollando su vida cotidiana normal tras el estreno del filme en el que actúan Lupita Nyong’o, Letitia Wright y Angela Bassett.
¿Cómo consiguió el papel?
Maribel Maceo lo explica: «Yo recibí un correo electrónico en la primavera del 2021 donde me pedían una foto del niño, ya que lo tenemos en las agencias Actors Network y Actors Access, en esta última página lo encontraron. Luego les envié tres videos y una semana después me llamaron y me dijeron que estaba interesados».
Cuenta que mientras rodaba el filme, Manuel Chávez recibía las lecciones de su escuela con una maestra.
Pero antes de saber de qué proyecto se trataba la madre pasó un año completo en conversaciones y envío de videos y demos. «Sabíamos que era una película, pero no que se trataba de una gran producción de Marvel: Wakanda Forever», sostuvo.
«Para Manuel es un poquito sobrecogedor y a veces se queda como wao, en shock, cuando lo miran. La verdad es que él no actúa como una celebridad. Le doy gracias a Dios. La meta es que trabaje en proyectos así de bonitos, que tocan a mucha gente, pero que recuerde siempre que hay que tener los pies en la tierra», anhela.
Ella acompañó a Manuel Chávez en este proceso. En California, USA, las leyes son muy estrictas con los niños actores, quienes siempre deben tener al lado a sus padres o tutor.
Por ahora, comenta Maceo, Todavía no hay una nueva película en carpeta. No obstante, a Manuel Chávez sigue realizando casting en RD y EE.UU.
Más de Namor en etapa de niño y adulto
Black Panther: Wakanda Forever altera drásticamente los orígenes del cómic de Namor adulto, interpretado por Tenoch Huerta Mejía.
En Marvel Comics, Namor nace de la princesa de Atlantis y un capitán de barco estadounidense, heredando una fisiología única gracias a los genes atlantes y humanos. Namor también es un mutante de nivel alfa, con su gen X que le otorga el poder de volar.
En el MCU, Namor conserva todos sus poderes, pero Atlantis en realidad no existe. En su lugar, Marvel Studios desarrolló Talokan, un reino submarino inspirado en la cultura mesoamericana. Con este cambio, Namor también obtuvo un nuevo nombre, K’uk’ulkan, el Dios Serpiente Emplumada.
Reseña la agencia AP que Tenoch Huerta Mejía logra darle magnetismo a Namor. De muchas maneras se asemeja al Killmonger de Michael B. Jordan, no es un villano y su furia puede justificarse. Pero su enojo sirve como magneto para Shuri, quien sigue de luto y está lista, tras la muerte de T’Challa, para “quemar el mundo”.